Viajamos hasta el gran archipiélago veneciano, famoso por sus góndolas, canales y estéticos puentes, pero también por callejones que ponen a prueba tu sentido de la orientación. Visitamos una ciudad que logró desafiar la lógica y consiguió levantarse sobre un terreno pantanoso e inhóspito. Un destino que acumula siglos de historia, de elegantes carnavales, que fue testigo del primer gueto del mundo y que vio fugarse al amante más conocido.
Venecia es una de las ciudades más bellas y románticas del mundo y aquí tienes varios motivos para que comiences a planificar tu viaje, con un itinerario pensado para 3 días.
¡Comenzamos!
15 lugares imprescindibles que ver en Venecia
1. Gran Canal
Es inevitable comenzar estos 15 lugares de Venecia con sus canales, pero sobre todo con su Gran Canal. Y es que en esta ciudad hay hasta 178, pero ninguno tan famoso como este, el más grande e importante, llegando a alcanzar los 90 metros de anchura en algunos tramos con una profundidad de unos 5 metros.
Il Canalazzo, como lo llaman en Venecia, serpentea a través de la ciudad durante más de 4km, formando una doble curva como si de una S invertida se tratase, separando la ciudad en dos partes principales, repartiendo sus 6 barrios a partes iguales en cada una de ellas.
El Gran Canal inicia su recorrido en la parte noroeste de la ciudad y lo finaliza junto a la Basílica de Santa María de la Salud. Un trayecto, entre vaporettos y góndolas, donde podrás admirar todo el esplendor en sus ostentosas casas venecianas y palacios que se esfuerzan por impresionar con sus mejores fachadas.
2. Puente de Rialto
A pesar de la longitud del Gran Canal, solo existen 4 puentes que lo atraviesan: el puente de la Constitución, el de los Descalzos, Rialto y el de la Academia.
Corría el año 1181 cuando se inauguró el primer puente sobre el Gran Canal, un puente flotante, llamado Ponte della Moneta por su relación con el lugar donde se acuñaba la moneda veneciana. Con el paso del tiempo, el Mercado Rialto fue adquiriendo notoriedad y un siglo después se decidió reemplazarlo por un puente de madera, que además podía ser elevado para permitir el paso de barcos.
El compromiso del Mercado Rialto aumentó y finalmente se produjo el cambio de nombre en el siglo XV, añadiendo además dos hileras de tiendas a ambos lados del puente. Así, los impuestos de estos establecimientos pasaron a ser fundamentales para su mantenimiento.
Por diferentes motivos, intencionados y accidentales, el puente de madera fue destruido en varias ocasiones, lo que motivó que las autoridades venecianas optasen por una búsqueda de soluciones. Finalmente se construyó entre 1588 y 1591 un puente de piedra de un único arco, algo muy innovador en la época, manteniendo las tiendas en sus lados.
Aunque hubo quien predijo que se derrumbaría en pocos años, Rialto ha conseguido mantenerse más de cuatro siglos, siendo hoy día el puente más antiguo y fotografiado del Gran Canal.
3. Plaza de San Marcos
No podríamos imaginarnos Venecia sin la Piazza San Marcos, a la que Napoleón Bonaparte calificó como “El Salón más Bello de Europa”.
San Marcos fue construida en el siglo IX con un tamaño y aspecto muy diferente al actual, pero siempre siendo el centro de Venecia al albergar edificios tan notables como la Basílica de San Marcos, el Palacio Ducal, el Campanile y la Torre del Reloj, un sorprendente reloj astronómico de más de 500 años de antigüedad.
Aunque hay varias plazas en la ciudad, la de San Marcos es la única que tiene nombre de plaza. Todas las demás son denominadas campi, debido a que solían ser huertos o pasto para el ganado, pero también en ciertas ocasiones eran utilizadas como cementerios. Esto era así en tiempos en los que Venecia era un grupo de islas autónomas.
4. Basílica de San Marcos
Llega el turno para el principal templo religioso de la ciudad, que no puede faltar entre los lugares imprescindibles de Venecia. La Basílica de San Marcos fue fundada en el año 828 para albergar las reliquias de San Marcos, traídas desde Alejandría. Debido a ello se construyó la famosa plaza que lleva su nombre.
Está considerada como una de las principales obras maestra de estilo bizantino, destacando en ella sus tonos dorados y los formidables mosaicos de la cúpula de la Ascensión, que datan del siglo XIII.
No te pierdas la parte superior de la basílica, donde tendrás la oportunidad de ver las esculturas originales de bronce bañadas en oro de los Caballos de San Marcos, traídas desde Constantinopla.
Y por supuesto quedaba pendiente la guinda a esta visita: las magníficas vistas de toda la Plaza de San Marcos que hay desde la terraza.
5. Campanile de San Marcos
Si la panorámica desde la terraza de la Basílica San Marcos es espectacular, la del Campanile (campanario) es sencillamente sublime. Desde sus 98,6 metros de altura se divisa muy bien la ciudad, pero también la laguna de Venecia e incluso los Alpes en días claros.
Pensada en sus orígenes como faro, su construcción se demoró entre los siglos IX y XII. Con el paso del tiempo sufrió diferentes intervenciones principalmente a causa de los impactos de rayos. Algo que se logró solventar en 1776 cuando se instaló un pararrayos.
En 1902 el Campanile de San Marcos se derrumbó y pasaron 10 años hasta que se terminó el nuevo campanario, una reconstrucción fiel al original.
6. Palacio Ducal
No podía faltar esta gran obra del gótico veneciano y símbolo de poder de la ciudad, que completa los lugares imprescindibles de la Plaza de San Marcos.
Este edificio posee en su exterior dos fantásticas fachadas que dan a la propia plaza y a la laguna de Venecia. Mientras, su interior es todo un laberinto de habitaciones y salas con elementos de estilo gótico, renacentista y bizantino.
Cabe destacar que este impresionante palacio ha tenido diferentes usos a lo largo de su milenaria historia. De hecho ha sido: la residencia de los dux, magistrados supremos y máximos dirigentes de la República de Venecia; sede del gobierno; de la corte de justicia; y también una cárcel veneciana.
7. Puente de los Suspiros
Precisamente, las celdas que había en el Palacio Ducal con el paso del tiempo eran insuficientes e inseguras, lo que motivó la construcción en el siglo XVI de las Cárceles Nuevas, al otro lado del Río di Palazzo.
Para conectar este canal veneciano con el Palacio Ducal se levantó el Puente de los Suspiros, una construcción barroca, totalmente cerrada, hecha con piedra caliza blanca de Istria.
Este puente recibe su nombre debido a los suspiros de los prisioneros que, desde aquí, veían por última vez el cielo y el mar. Entre los presos que han pasado por aquí se encuentra Casanova, el amante más famoso del mundo, que logró escapar de los calabozos.
8. Teatro La Feniche
A unos 5 minutos a pie de la Plaza de San Marcos se halla La Feniche (fénix,) considerado como uno de los teatros de ópera más prestigiosos del mundo.
La Fenice fue inaugurado en 1792 y en él se han estrenado obras maestras de Rossini, Donizzeti, Bellini y Verdi, quien trajo hasta ciudad de los canales su célebre “La Traviata”.
Este elegante teatro sufrió dos importantes incendios a lo largo de su historia, siendo el más reciente en 1996. Su restauración duró varios años, pero mereció la pena la espera puesto que desde 2003 es posible disfrutar de algún evento o simplemente realizar una visita con audioguía, cuya duración es de aproximadamente 45 minutos.
9. Palacio Contarini del Bovolo
Venecia esconde muchos tesoros difíciles de encontrar entre su entramado de laberínticas calles. Uno de ellos es este precioso palacio del siglo XV construido por la familia Contarini, desde donde se tiene otra bonita panorámica desde la planta superior.
Este edificio destaca fundamentalmente por su Scala Contarini, una llamativa escalera exterior de caracol (bovolo en italiano), que da forma de torre al palacio y que otorgó su segundo apellido.
10. Barrio de Cannaregio
Otro destacado en este artículo es el barrio más septentrional y más poblado de Venecia, sin duda, uno de los distritos de visita obligada al ofrecernos muchos rincones interesantes para pasear, restaurantes con una más que aceptable relación calidad-precio a nivel general y mucha historia.
No olvidemos que este barrio es famoso porque dentro de él hubo un gueto judío entre los siglos XVI y XVIII. No fue un gueto cualquiera precisamente, hablamos del más antiguo del mundo. Su historia comenzó un 29 de marzo de 1516, fecha en la que Venecia segregó a la comunidad judía, y concluyó con la liberación de las tropas de Napoleón en 1797. No obstante, transcurriría casi un siglo hasta que estos ciudadanos consiguieron, por fin, derechos de ciudadanía.
En el Barrio Judío es imperdible el Campo del Ghetto Nuovo, la plaza principal del barrio, así como el Museo Judío (Museo Communità Ebraica).
Como curiosidad, la palabra gueto proviene del Ponte del Guetto, que lo conectaba al resto de la ciudad. Dicha palabra hace referencia al hierro forjado de su elegante barandilla. Y es que “Guetto” significa fundición, a cuya labor estaba inicialmente dedicado este lugar donde había unos hornos de hierro, anteriores a la llegada de la población judía.
11. Librería Acqua Alta
Muy cerca del final del barrio de Cannaregio, en el corazón del distrito de Castello, encontrarás una librería única, de las más bonitas del mundo.
En ella llama la atención la enorme cantidad de libros que hay apilados en sus estanterías, en sus góndolas, en bañeras, e incluso formando escaleras…
No faltará tampoco una góndola disponible para los posados y, el gato librero, a veces vigilante y a veces ajeno al visitante.
12. Fondaco dei Tedeschi
La última recomendación dentro de la ciudad es el Fondaico dei Tedeschi, un elegante edificio histórico ubicado junto al puente de Rialto, que incluye un mirador gratuito con una magnífica panorámica de 360 grados del Gran Canal y de toda Venecia.
A pesar de ser gratuito es necesario reservar para poder acceder a él. Trata de hacerlo con la mayor antelación posible en este enlace, para así no quedarte sin los mejores horarios disponibles. Recuerda que dispones de 15 minutos para tomar fotos y disfrutar de las vistas desde su terraza.
13. Excursión a Murano, Torcello y Burano
Pocas cosas hay más recomendables en Venecia que hacer una excursión de un día a estas maravillosas islas del norte de la laguna, algo que te cuento próximamente en este post.
14. Isla de Santa Elena
Esta es mi recomendación más personal. Antes del anochecer, si tienes tiempo suficiente, una de las mejores ideas es caminar a lo largo de todo el paseo marítimo, con parada en los Jardines de la Bienal de Venecia incluida, hasta llegar a la isla de Santa Elena, la más alejada de la ciudad.
Esta isla no es importante por edificios relevantes, pero aquí encontrarás la verdadera esencia de la ciudad, además de zona de parques con restaurantes muy asequibles o el curioso estadio de fútbol Pier Luigi Penzo, el único al que las aficiones llegan en barco.
15. Visitar una de las islas cercanas
Según el tiempo disponible, elige alguna de las islas de la laguna de Venecia que vimos en el anterior artículo. Será el mejor complemento posible a un viaje inolvidable por la ciudad de los canales.
Itinerario para 3 días
Este itinerario está pensado para una distribución equitativa durante los 3 días, dejando para el atardecer dos lugares muy recomendables como son la avenida que conduce a la isla de Santa Elena y el Fondaco dei Tedeschi.
El segundo día deja algo de margen para añadir una visita a las islas cercanas de la laguna. Dependiendo del tiempo disponible, sería interesante cambiar algún lugar del segundo día al primero y comprimir algo más el día inicial.
Día 1
Plaza de San Marcos
Basílica de San Marcos
Campanile de San Marcos
Palacio Ducal
Puente de los Suspiros
Isla de Santa Elena
Día 2
Barrio de Cannaregio
Librería Acqua Alta
Palacio Contarini del Bovolo
Teatro La Fenice
Gran Canal + Puente Rialto
Fondaco dei Teideschi
Día 3
Excursión a Murano, Torcello y Burano
Fotos © coleccionistasdeislas
Etiquetas: Europa, Italia, Venecia
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