Las 13 islas de Breslavia

La ciudad de Breslavia es en la actualidad una de las joyas de Polonia. Aunque realmente esta localidad está bajo…

17 marzo, 2024

Por: Raúl V.


La ciudad de Breslavia es en la actualidad una de las joyas de Polonia. Aunque realmente esta localidad está bajo dominios de Polonia desde 1945, después de que se modificasen las líneas fronterizas en Europa tras el final de la Segunda Guerra Mundial. En la antigüedad perteneció a Bohemia, Austria, Prusia y Alemania, haciendo que hoy día sea una ciudad milenaria con una amplia riqueza cultural que podrás comprobar al observar sus edificios, calles y plazas.

Sorprendentemente uno de los motivos que en los últimos años ha atraído más turismo a Breslavia es la enorme cantidad de enanos o gnomos que hay escondidos en sus calles y callejones, puertas y ventanas e incluso farolas. Encontrar los más de 400 gnomos es todo un reto tanto para adultos como para niños.

Y como no, su notable patrimonio y algunos de sus enanos se encuentran también en sus 13 islas fluviales, las cuales descubrirás siguiendo el curso del río Óder. Cabe resaltar que esta cantidad ha ido variando con el paso del tiempo, y es que, algunas islas dejaron de existir, mientras que otras surgieron como resultado de la construcción de nuevos canales de agua.

Localización de las islas del río Oder en Breslavia

La mayoría de islas se localizan en el barrio de Śródmieście, al norte del río Óder, siendo la mayor concentración, como vemos en el mapa, justo al norte del casco antiguo. (A unos 10-15 minutos a pie de la Playa Mayor de Breslavia).

Aquí tenemos un pequeño archipiélago formado por: isla Bielarska , isla Słodowa , isla Młyńska , isla Piasek , isla Daliowa , Tamka .

En esta zona, hacia el oeste, también se encuentra Kępa Mieszczańska junto a dos pequeñas hermanas sin nombre. Mientras que hacia el este localizamos Ostrów Tumski, la cual, antes de que se rellenara uno de los brazos del Óder, también era una isla separada.

A unos dos kilómetros al este tenemos la isla más grande de Breslavia: la isla Wielka, muy próxima a las pequeñas Szczytnicka y Opatowicka, que fueron creadas como resultado de la construcción de zanjas para canales y esclusas.

La solitaria Rędzińska , la última y más alejada, queda en el extremo noroeste de la ciudad.

Las 6 islas más visitadas

Isla Tamka

Comenzamos por la pequeña isla de Tamka, la más próxima al centro de Breslavia. Una ínsula que en el siglo XIII perteneció a la orden de los Canónigos de la Santa Cruz de la Estrella Roja, quienes construyeron dos molinos y un puente de madera que la conectaba a la ciudad. Ambos molinos fueron demolidos en 1876. A comienzos del siglo XX fue construido el actual puente de hierro que une a Tamka.

En la isla hay dos edificios destacando el situado en su lado oriental, que fue utilizado hasta hace unos años por la Facultad de Biotecnología de la Universidad de Breslavia. Hoy día es un edificio de viviendas y oficinas, que alberga en la planta baja el Wyspa Tamka x Art Hub, un popular bar durante la temporada de verano.

Isla Piasek

Si caminamos 300 metros, enseguida llegaremos a Piasek, la isla de las arenas. Es la principal de las 6 del casco histórico de Breslavia y está conectada mediante puentes con las siguientes islas del archipiélago.

Piasek fue propiedad de la iglesia hasta 1810. De hecho, en ella existe hoy la Iglesia de la Santísima Virgen María y un antiguo monasterio barroco. Ambos sufrieron graves daños durante el asedio de Breslavia, al final de la Segunda Guerra Mundial, quedando mucho tiempo en estado de ruina.

Justo después de la guerra fue reconstruida la iglesia y años más tarde el monasterio, el cual alberga una sección de la Biblioteca de la Universidad de Breslavia. A pocos metros de ellos se encuentra el monumento del Cardenal Bolesław Kominek, primer arzobispo polaco de Breslavia.

Isla Daliowa

Al suroeste de Piasek existe un puente que la une a Daliowa, la más pequeña de las 6. Fue creada recientemente y designada como zona de parque público. En 2017 se levantó una curiosa escultura de acero.

Isla Mlynska

La llamada “isla del molino” recibe su nombre  del molino Feniks, construido en 1267. Feniks estaba ubicado en la isla Mlynska al mismo tiempo que se levantó el molino María, en la vecina isla de Piasek.

El molino de Feniks sufrió un incendio por primera vez en 1288 y posteriormente tanto Feniks como María se quemaron en 1466. Fueron reconstruidos, cambiaron de dueño y de nombre, y es que durante un tiempo se llamaron molinos de Corpus Christi. Durante dicho periodo, Mlynska fue conocida también como la isla del “Corpus Christi”. Aguantarían tres siglos más, antes de volver a quemarse y volverse a construir varias veces. Finalmente en 1840 se construyó un edificio sobre el canal que unió a María y Feniks, pasándose a llamar «Molino de María». Estuvo en funcionamiento hasta finales del siglo XX, para después convertirse en un edificio de oficinas y viviendas.

Junto al molino “María” en la isla también se encuentra el hotel Tumski.

Isla Slodowa

Desde Mlynska cruzamos el puente Słodowy que une a esta isla con su vecina Slodowa, que desde hace años es un lugar de encuentro para la juventud, realizándose en ella diversas actividades culturales: conciertos, talleres y espectáculos. Cabe destacar una característica que la hace única, y es que desde hace poco tiempo este lugar, a diferencia del resto de la ciudad, queda exento de la prohibición de consumo de alcohol en lugares públicos.

Slodowa es probablemente la isla que más ha cambiado. Inicialmente se llamó Bielarska Przednia, nombre que conservó hasta 1945 y cuya procedencia tuvo origen en la Orden de Santa Clara. Estos fueron sus propietarios desde la Edad Media hasta principios del siglo XVIII, cuando pasó a ser propiedad de la ciudad.

En el siglo XVIII, Slodowa estaba conectada a Mlýnská y las islas Bielarska con un puente de hierro. Más tarde, en la segunda mitad del siglo XIX, la gente comenzó a construir viviendas en ella con sistemas de alcantarillado, teléfonos y electricidad. En 1945 el ejército alemán se instaló allí con artillería, lo que lo hacía a menudo blanco de bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial. Durante el sitio de Breslavia, al final del conflicto, casi todos los edificios de la isla habían sido destruidos, permaneciendo solo en la actualidad un edificio de 6 plantas.

Isla Bielarska

Es la más septentrional y favorita de los niños, los cuales pasan horas y horas jugando en sus parques infantiles.

Anteriormente albergó un molino levantado en el siglo XIII y una fábrica de bebidas espirituosas construida en el siglo XVIII, ambos destruidos durante la Segunda Guerra Mundial.

Tras la demolición de las ruinas del molino en 1975, Bielarska quedó vacía y se decidió convertirla en una isla de recreo. Bielarska también rinde un pequeño homenaje a Sócrates, con una escultura del artista Stanisław Netswoldow, hecha en 1993.

Las otras islas de Breslavia

Kępa Mieszczańska

Muy próxima al archipiélago anterior, al este, se halla una isla de tamaño considerable que a menudo sufría inundaciones. Por ello, comenzó a desarrollarse más tarde que las protagonistas anteriores. En ella se ubicaron principalmente almacenes y molinos, más tarde se añadió una importante refinería de azúcar así como edificios militares.

A mediados del siglo XIX el papel militar e industrial de la isla fue reemplazado por un rápido crecimiento de nuevas viviendas, arrasadas durante la Segunda Guerra Mundial y reemplazadas en los últimos años por edificios modernos.

Junto a esta gran isla existen dos hermanas pequeñas sin nombre conocido.

Completan las islas de Breslavia las islas Szczytnicka, Wielka y Opatowicka, al sureste de Breslavia y  la isla Rędzińska, en el extremo noreste.

Ostrów Tumski, una antigua famosa isla de Breslavia

Volvemos al más que interesante archipiélago que rodea el centro urbano de Breslavia. Aquí nos dejamos un lugar, una importante isla que curiosamente ya no lo es: la “isla de la catedral”. Antiguamente sí lo fue, aunque su periplo concluyó en el siglo XIX, debido a las sucesivas inundaciones que propiciaron que se tuviese que rellenar de tierra y cemento uno de los afluentes del río Ódra.

Ostrów Tumski no era una isla cualquiera, de hecho aquí fue donde comenzaron a cimentarse los orígenes (siglo VIII) de la bella ciudad de Breslavia, estrechamente vinculados a la iglesia. Actualmente su atmósfera sigue recordándonos su pasado, desde el momento en que entramos por el icónico puente Tumski, al caminar por sus calles adoquinadas, o admirando sus edificios religiosos con la Catedral de San Juan Bautista como joya de esta ex isla.

Y por suspuesto, al anochecer trata de seguir la estela del famoso farolero del distrito de Ostrów Tumski, fiel a su cita diaria con el encendido a mano de las lámparas de gas. Sin duda uno de los motivos por los que merece la pena la visita a este lugar.

Fotos @ coleccionistasdeislas


Etiquetas: Europa, Polonia

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